Por Lic. José Vargas Carrasco.
…»Estoy muy viejo para que algunos me quieran jugar el dedo en la boca». Así cortaba cartucho el Dr. Navarro ante los medios de comunicación que daban cuenta en la conferencia de prensa. Su molestia partía de un argumento justificable. El infinito tema de la Universidad Autónoma de Nayarit generado por la debilidad de sus autoridades rectorales, del estado de derecho, de la remoción de los escombros del pasado coludidos con la corrupción, adquiere el carácter de obligatoriedad al tener «carnita» en demasía.
Su justificado enojo desentraña los excesos perpetrados desde el poder de sus administraciones donde el hecho lo fueron transformando en derecho haciendo total indiferencia o mutis. La moral pública de sus autoridades pareciera que han sido erosionada, que se encuentra bajo los fétidos escombros de la corrupción.
La lectura de la conferencia de prensa coloca en la debida perspectiva el tema que definió la política pública a seguir, una política que se articula para exterminar la impunidad entre un pasado perdido en la sombra de la corrupción y un presente alentador y esperanzador.
Nayarit debe seguir de guia para reencontrarse con muras a un propósito mas claro y equilibrado socialmente aprovechando el redescubrimiento de la identidad nayarita, de la enorme esperanza que abraza y cobija el Dr. Miguel Angel Navarro Quintero.
La UAN entonces es interés colectivo…
Asi las cosas.