Por Lic. José Vargas Carrasco.
-A UN SOLO JALÓN-…De la etapa de mi niñéz recuerdo divertidas imágenes. Un juego de moda de entonces, se trataba de la famosa «soga».
Dos grupos de niños y niñas en cada extremo jalando y jalando cada quien por su extremo. Quien tocaba el límite de la línea que dividía los dos grupos, resultaba el perdedor. Se trataba pues, de la demostración de fuerza de cada grupo, de mostrar el músculo o «pote» como decimos en Nayarit.
Lo anecdotario de aquella infancia narrada, sirva hoy para una necesaria reflexión y actitud: hoy por hoy no hay dos extremos, no hay soga, no hay fuerza qué demostrar, solo existe un punto referencial y compromiso con nuestra entidad ¡NAYARIT!
Entonces, a un solo jalón…
Tengan buen domingo.
*imágen de la alameda.