Por Lic. José Vargas Carrasco.
…Entre saludos, empujones, abrazos, tumultos, fotografias, jalones, vítores de «no estas solo», la enorme marea guinda parecía bañar por 5 horas Paseo de la Reforma y avenidas aledañas que forman el circuito a la plancha del zócalo de la CDMEX el 27 de noviembre pasado.
El torbellino social, el imanólogo mandatario volvió a tomar la calle como en los viejos tiempos acuerpado siempre por su manto protector: el pueblo mexicano. Volviendo a su orígen de lucha social , su opción única a 4 años de gobierno fué la disyuntiva por renacer el proyecto de país de la cuarta transformación.
Mientras tanto los oficiosos adversarios de cabecera del propósito Lopezobradorismo no van a bajar el tono de sus ataques (los cuales aclaro tienen todo el derecho de hacerlo), lo que realmente preocuparia es la ausencia de narrativas anodinas o insustanciales carente de toda relevancia.
Los hechos del domingo 27 de la marcha ya estan registrados en la memoria colectiva de la mayoría del pueblo mexicano. De cualquier ángulo por el que se desee abordar su análisis, aquella emotiva he impresionantes imágenes como la que usted observa, es fe pública inquebrantable como incuestionable.
Las emociones en efecto es instrumento principal de una narración como ésta que tiene un hecho incuestionable, anecdótico como la madre de todas las marchas del 27 de noviembre domingo.
AMLO:»LO VOLVIÓ HACER»…
Asi las cosas.
*Imágen de la autoría de Luis Antonio Rojas.