-Dr. Navarro: «huella y rasgo en estación Yago»
…El tronante y apasionante mensaje en la comunidad de Yago municipio de Santiago, dibujó el yo interno del Dr. Miguel Angel Navarro ante las lamentables evidencias de injusticia, agravio, afrentas, pobreza y falta de oportunidades como una acumulación de males de Nayarit. Su aguda crítica de sus condiciones menesterosas le giraba al corazón de la asistencia la órden de acelerar los latidos por el desgarrador discurso.
Mujeres, hombres campesinos lo miraban un tanto atónitos, animados, alentados, incitados, conmovidos por el precandidato de MORENA, de la esperanza que concentró la atención y la credibilidad. Fué una total seducción social impresionante, excitable por uno de los mayores contenidos de sus mensajes.
No se trató de un ejercicio de simple catarsis de aquellos que templan el espíritu y el deseo desesperado por un Nayarit de mayor equidad y justicia, mas bien se trataba de una esperanza que tenía rumbo y destino que parece estar a la vuelta de la esquina.
En Yago estación el principio de una esperanza, de una fe y fuerte convicción, se recibía en la bondad de los asistentes a la reunión, su mensaje, su bravío discurso del Dr. Navarro lleno de signos e interpretaciones de que las cosas van próximamente a cambiar.
Su esperanza incesante y reiterativa, su profundo compromiso por cambiarle el rostro famélico al estado, fueron los rasgos distintivos de una inicial precampaña humanista que puso en completo éxtasis su fortaleza interna, su sensibilidad social que lentamente lo va acercando a una impostergable esperanza y misión que ya no tiene vuelta.
La aguda crítica en Yago de sus condiciones sociales atenuantes va devaluando el mas frívolo concepto que sobre política se había concebido y que ahora por sus trágicos saldos corruptibles del pasado, se debate en su replanteamiento. «La vacuna contra la pobreza es la honestidad» -remataba en figurativa frase-; «vámos a construir un Nayarit de respuestas, volviendo levantar la política con una revolución que empieza con la conciencia» – aseguraba con abierta garganta-.
Lo sucedido en Yago, amable lector, es expresión pública, es postura, es credo, testimonio, es doctrina, es programa, es acto de fe que deja rasgos de su inquebrantable sentido social de la auténtica política. El acto del sabado es una especie de desideratum social confeso, de una formación sólida indicial que se asoma como esperada y gratificante esperanza. El Dr. Navarro deja asi huella y rasgo de su misión a la que está llamado.
Mientras tanto en Yago retemblaba la queja dolida y sentida…
Asi las cosas.
Lic. José Vargas Carrasco. Egresado de la Facultad de Derecho de la UNAM. Maestría en Derecho de la Seguridad Social. JVC…